martes, 29 de octubre de 2013

MIL CUATRO, DÍGAME


Buenos días, soy Tania, le hablo desde el centro MoviStar de Toledo y voy a hacer todo lo posible por ayudarle, le importaría decirme su nombre y DNI para dirigirme a usted?. Hola Tania, soy Diego, mi DNI es el 10041004 y te hablo desde el móvil porque no tengo teléfono en casa y llevo dos meses y medio intentando que me lo pongáis. Llamo todos los días a este número y conozco a todas y cada una de tus compañeras en los centros de Toledo, León y Santander: Vanessa, Evelín, Marta, Olga, Genoveva y Camino. Cada una tiene un nombre distinto y cada una me ha contado una historia distinta para explicarme por qué no me hacían algo tan sencillo como un traslado de línea. Me habéis dicho primero que en cuatro o cinco días estaría todo resuelto, luego que se retrasaría porque era agosto, después que no era posible mantener el mismo número, luego que sí, más tarde que no se puede hacer traslado y que tengo que hacer una baja y luego un alta, después que devuelva el router, al día siguiente que ¿por qué he devuelto el router?, al cumplir un mes de la petición que borrabais el expediente y empezabais de nuevo, incluso me habéis llegado a asegurar que hace tiempo que los técnicos estuvieron en casa y me hicieron la instalación y yo sigo aquí sin línea, desesperado, aguantando el chaparrón de mis hijos que tienen un agudo síndrome de abstinencia de YouTube. He intentando poner una reclamación en Internet, pero el sistema está muy bien desarrollado para que a los que somos un poco cortitos nos sea imposible quejarnos; también he ido a la cojotienda que tenéis en Gran vía y me han dicho que no pueden hacer nada, que los traslados los lleváis las amables máquinas y desinformadas chicas del 1004. He pedido hablar con un superior, con alguien que sepa cómo funciona esto, con ese con el que habláis cada vez que me dejáis ocho minutos escuchando una insoportable sintonía, pero no me lo permitís. Sólo quiero ser vuestro cliente, que me cobréis una pasta por mis llamadas y mis mails, que me llaméis todos los días a la hora de la cena para ofrecerme Imagenio... pero no lo consigo. Porfa, le puedes decir a César Alierta que se ponga, a ver si me echa una mano o por lo menos si me puedo desahogar explicándole cuan caótico es el servicio de atención al cliente de su compañía, lo complejo que es hacer algo sencillísimo, la inutilidad de su entramado informático y sus sistemas de gestión… (tu-tu-tu-tu-tu-tu…) Tania, Tania, ¡Taaaaania!
En Movistar trabajamos para hacerle la vida más fácil, por favor marque del 0 al 9 el nivel de satisfacción con el servicio recibido…

PD. Mañana os pondré una entrada identica a esta pero cambiando lo de Movistar por Gas Natural... Bueno, os perdono.

domingo, 27 de octubre de 2013

¡VIVA EL PAPA!


Acabo de romper los esquemas a más de uno. A conciencia lo hago. ¿Por provocar?, no, por ser justo. Nunca antes, en el transcurso de las cinco últimas décadas, me había sentido tan cerca de la Iglesia Católica, lo cual tampoco es para tirar cohetes porque aún sigo bastante, pero que bastante, lejos. Todo lo lejos que un ateo puede estar de una iglesia, mucho.
Sin embargo he de reconocer que el nuevo Papa me ha sorprendido positivamente con casi todas sus declaraciones. Mira que venía precedido de ciertas dudas o nebulosas por su pasividad frente a la dictadura argentina, pero todos los pasos que ha dado, desde que la plaza de San Pedro se llenó de humo blanco, han sido, cuando menos, esperanzadores. Vale que para mi el pope no es mi líder de opinión, pero para mucha gente sí lo es y sus comentarios, críticas o consejos pueden marcar positiva o negativamente el devenir de este mundo, cruel, por cierto.
Veníamos de un túnel. Los últimos pontífices se dedicaban a leer la cartilla a los políticos y a regañar a los infieles por asuntos intrascendentes, dando la espalda a los grandes problemas de la sociedad. Era más importante la evangelización que la erradicación de la pobreza; la castidad, que el sida; el matrimonio hetero, que la pederastia… Sus problemas y pecados quedaban siempre escondidos bajo una rancia y sospechosa sotana.
Y en esas llegó Francisco dando una lección de lo que su cargo significa y sacando a relucir ese papel "buenista" que se espera de una religión. Su viaje a Lampedusa, sus palabras de indignación y acusación ante el drama de los inmigrantes, su reconocimiento de culpas y malas prácticas en la iglesia, su recomendación para centrar el tiro en lo realmente relevante y ser más permisivo con las nimiedades, su incisiva crítica a la sociedad capitalista, su rápida intervención para quitar de en medio al obispo opulento… Han sido una serie de gestos muy por encima de lo esperado en ese estamento, pero, en mi opinión, de gran inteligencia, porque para evangelizar y evitar la estampida de católicos, hay que lanzar mensajes más tolerantes y constructivos que las amenazantes reprimendas anacrónicas a las que nos tenían acostumbrados los Caminos y Roucos de turno.
Muchos creen que no durará mucho, que la curia le hará la vida imposible o se le atragantará un café de forma accidental, pero mientras siga en esta línea, ¡Viva el Papa!, aunque me cueste.

PD.El retablo de la foto es original de la iglesia de Santamera (Guadalajara), pero el obispado se lo llevó a Trillo, donde hay más fieles.

jueves, 24 de octubre de 2013

HACHETETEPEBARRABARRA HA VUELTO


Nos hemos mudado. De ahí el apagón. Acabar la reforma, después de nueve meses de obras y de sobredosis de fontaneros, electricistas, carpinteros, cerrajeros, arquitectos, aparejadores o taxidermistas... ha sido un parto sangriento. No entro en detalles, los imagináis, sólo os transmito la satisfacción de haber concluido la que espero sea última obra de mi vida y haber contribuido a reflotar el maltrecho sector de la construcción. Montoro, nos debes unas.
En teoría era una mudanza sencilla, de una casa a la de al lado. Del presente al pasado para convertirlo en futuro. Qué cursilada, pero cierta, pues tras veinte años fuera de la choza de mis padres, he regresado para quedarme. Una sensación curiosa y cálida: una casa nueva sobre la base de la de toda la vida; pues eso el futuro construido sobre el pasado.
Se mezclan emociones, la alegría de los niños ante la novedad y descubriendo cada rincón de la nueva vivienda, contrasta con la desesperación de los hermanos Karamazov al regresar al mismo estante de la librería en el que habían estado durante 40 años. El estudio cambia de cuadros, de estilo, de ruido… Donde estaba la ducha está la cama, lo que era puerta ahora es ventana, la nevera está donde el horno y el pasillo ha sido privatizado. Todo es distinto, pero la casa es la misma, con todo lo bueno y creo que nada de lo malo. Bueno, sí, las ausencias.
Por eso hoy, con el taladro aún caliente, los riñones doloridos de mover cajas y las manos resecas de limpiar tanta mierda, podemos dar por concluida la mudanza (por cierto, os recomiendo a los Hermanos Moraleda, qué manera de subir y bajar pianos, cuadros, muebles y cajas repletas de pasado).
Así que ahora, que estamos mudaditos y que los amables señores de Telefónica han conseguido realizar el traslado de la línea, setenta y seis días y ochocientas llamadas después de mi solicitud, procedo a reinaugurar este insigne e insignificante blog con el mismo espíritu con que fue creado: lo que salga de los huevos, cuando salga de los huevos.