
El funbol es asin, unas veces se gana y otras se pierde. Así que no os voy a hacer la crónica del partido. Sólo resolver algunas dudas que me surgen. La primera es que me parece que el Príncipe queda ya mejor en cámara que su Papi y me pregunto sino sería un buen momento para el relevo, de regalo por la "Europa League" esta. También dudo de la cuestión religiosa y me pregunto cuántas personas, por muy colchoneras que sean, habrán empezado a creer en Dios gracias a la camiseta de Falcao; yo reconozco que cuando he traducido lo de "Believe in God" lo he intentado, pero no me ha salido, quizás es porque estaba en inglés. Que tipo espabilao el colombiano que intenta captar creyentes más haya de los hispano parlantes.
Tampoco me he quedado muy tranquilo viendo a Iturralde vestido del Atletic. Eso de que los árbitros tengan equipo y los jueces partido político es algo que siempre he llevado mal. Claro, que últimamente no tengo claro de quién me fiaría más. No me gusta la politización de la justicia, pero tampoco la del fútbol y por eso me han dado arcadas cuando he visto a un ultra atlético con la bandera del aguilucho y a los abertzales metiéndonos la de los presos hasta en la sopa. Qué feo es también, oír el "Qué viva España" cuando se utiliza de forma arrojadiza para tocar las narices al nacionalismo. No creo que nadie se haya quejado cuando cada jugador del Atlético ha sacado su bandera para presumir de su origen, colombiana, asturiana, brasileña... Hasta me hubiera gustado ver a los entrenadores con la argentina, aunque fuese una provocación. Por cierto, no habiamos quedado que eso de ir nacionalizando no se hacía... Perdón que de eso no toca hablar, hoy es el día rojiblanco, que los chavales ya saben por qué son del Atleti.
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