El idiota. Tranqui Gallardón, que no va por ti. Tranqui Espe, que no te voy a meter más caña.
El idiota. No es lo mismo ser tonto que ser idiota. El tonto tiene algo entrañable, el idiota provoca rechazo. La cena de los idiotas, aquella divertida, pero cruel película, no era realmente una cena de idiotas sino de tontos. Daban pena. El tonto da pena, por incapacidad; al idiota dan ganas de darle una colleja.
En la vida profesional uno puede cruzarse de mucho en mucho con algún tonto y cuando te das cuenta, intentas ser condescendiente y compasivo. Pero con una frecuencia mucho más alta, lo que se te cruza en el camino es un idiota y tienes que apretar los dientes para no decir lo que piensas y sujetar los puños para no golpear la mesa. La idiotez es gris o, mejor dicho, el portador de la idiotez es grisáceo. No suele ser muy inteligente, por algo es idiota, pero no lo sabe. De hecho se piensa que es más listo que los demás, por eso es idiota. Le gusta dar lecciones, sentar cátedra sin el más mínimo sentido de la humildad o la modestia. Suele ser envidioso, celoso, ambicioso y trepa. Le gusta el protagonismo y cuando habla moldea la voz y se escucha. No puedo con la gente que se escucha a sí misma. En ocasiones se rodea de seres más grises para evitar que le hagan sombra. En presencia de jefes es camaleónico y pelota. Vamos, que es un idiota.
Y cuánto tiempo dedica uno en la vida a desactivar idiotas... Tratando de explicarles, sin llamarles idiotas, que lo que están diciendo es una idiotez. Preocupado porque sus idioteces no sean percibidas como cosas sensatas. Agobiado por si alguien te mete en el mismo saco y te identifica con un idiotilla de estos.
Nada más lejos de querer parecer cruel o prepotente o simplemente listillo, pero es que en las últimas semanas ha subido el IPC (idiota per cápita) en mi vida y ya sabéis que escribiendo me desahogo. Supongo que ninguno de ellos estará leyendo esto y si lo hace no se dará por aludido, porque ya os he explicado que el idiota no reconoce nunca que lo es. Otra cosa son los tontos, los tontos sí nos solemos dar cuenta.
Necesitaria un poco mas de informacion. ¿ los idiotas se echan mechas?¿son bajitas? ¿ les gusta la cerveza?¿no saben montar en bici?..........que intriga, que dolor de barriga.
ResponderEliminarY que me dices de la frasecita " de lo bueno que eres, eres tonto". Yo creo que la gente buena es buena y punto. Tontos son los que se aprovechan de esa gente buena.
¿Y dices que algún idiota lee tu blog? ¿Y que además te rodean en el ambiente laboral? Estas dando demasiadas pistas... y te van a pillar. Como buena idiota no me doy por aludida, por supuesto, si acaso tonta de remate si. Por cierto muy chula la foto del tonto sujetando el objeto imposible en Santamera cuando no era un chalete elegante...
ResponderEliminarMandeeeee???
ResponderEliminarOcaña, que gracioso eres!!!! Me parto
ResponderEliminarGracioso o tonto :) Espero no ser idiota :(
ResponderEliminar